REFLEXIONES

PASO A PASO

 

 

Julio Bevione

 

A veces, no es que no sepamos hacer algo. Pero no concluimos, o quizás ni siquiera lo comenzamos, porque esperamos hacerlo de golpe, todo junto, de la manera que debíamos, como nos habían dicho o como imaginábamos que se hacía. Lo cierto es que para concluir algo hay que ponerse en marcha. Y para ponerse en marcha, hay que dar el primer paso, sin necesidad de saber mucho más que dónde dar esa primera pisada, que generalmente es, hacia adelante.

Esto aplica a todo proyecto, incluso en nuestro trabajo personal. Tratamos de ser amorosos cuando no estamos tan listos para serlo, o muy positivos cuando aún estamos enredados en pensamientos de terror.

Salirnos de ese ideal y ser honestos con lo que podemos hacer en ese momento, no solo es suficiente, sino que en mi experiencia, ha sido lo más efectivo y único posible.

Preguntarme por ejemplo ¿cuál sería es la mejor manera en que puedo tratar a esta persona?, me saca del intento de ser amable cuando mi ego no hace más que buscar razones para llevarme a ser menos tolerante. O ¿cuál sería la mejor manera que tengo para abordar ésta situación?, me puede mover de un momento de negatividad a otro mejor, pero sin llegar a cruzarme al lado del optimismo de un solo salto.

Cuando queramos llegar a la meta, recordemos que primero hay que comenzar. Y para eso alcanza con ponernos en marcha.

Poco a poco.

Paso a paso.

 

Fuente: http://juliobevione.com/

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

− 3 = 7