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EL INGENIERO ALEMÁN QUE COBRÓ A HENRY FORD 10.000 DÓLARES POR MARCAR UNA CRUZ
Pedro Gargantilla Los médicos empleamos con cierta asiduidad el adjetivo «proteiforme» para referirnos a una enfermedad que cursa con manifestaciones clínicas tan diversas que puede sugerir otro proceso patológico. Este vocablo deriva de «Proteus», el dios jorobado de la mitología grecolatina, una divinidad capaz de predecir el futuro a aquel que consiguiera capturarlo. Para evitar tener que hacerlo este dios mutaba continuamente de aspecto. Proteus fue también el apelativo con el que se dirigía a Karl August Rudolf Steinmetz (1865-1923) una de sus tías. Su pomposo nombre contrastaba con su aspecto físico, ya que era enano, corcovado y de caderas deformes. Estas deformidades no fueron óbice…
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CULPA DE LOS GLIPTODONTES
Gonzalo Peltzer Debe ser un instinto ancestral de los argentinos. Quizá quedó en los genes de los patagones el miedo a los gliptodontes (especie de armadillo gigante) que campaban en la pampa hace 200.000 años. O el mareo hereditario de los que se bajaron de los barcos para mestizarse con las hijas de los guaraníes y charrúas… Está probado que los argentinos no podemos vivir sin vías de escape. Padecemos una ansiedad por escapar de la gente que nos pone locos. Lo digo de los argentinos porque los conozco un poco más, pero tenga cuidado que quizá lo hayamos contagiado a otros países del continente a…
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SILVIO RODRÍGUEZ Y LA HAMACA HAWAIANA
Gino Winter «Ojalá Dios exista y un día se le pase la borrachera…» Unos fortísimos latidos me despertaron. Sentía que el corazón me iba a explotar en el pecho; el eco repetido del sístole y del diástole me retumbaba, rebotando entre los oídos y el cerebro, y subiendo de intensidad en cada arremetida. Me puse lívido del susto. Traté de bajarme de la hamaca, en la que me había quedado dormido, para ir volando al hospital más cercano o, tal como iban las cosas, para llamar a una ambulancia, pero mis brazos no me respondían, es más: no los encontraba, es decir, no los sentía ni…
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NOVIA
Alejandro Dolina Hace mucho tiempo, yo tenía una novia buena y hermosa. Me amaba con una devoción tal, que no pude resistir la tentación de ser malvado. Me solazaba en la traición, en el capricho, en la impuntualidad, en la mentira gratuita. Ella lloraba en secreto, cuando yo no la veía, pues sabía que su llanto me irritaba. Pero un día, un incidente que ni siquiera recuerdo, me despertó el temor de perderla. El amor crece con el miedo. Mi conducta cambió. Me fui haciendo bueno. Quise pagar el daño que había hecho y empecé a vivir para ella. Le hacía el amor en todos los zaguanes,…
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FEDERICO
Vicente Aleixandre A Federico se le ha comparado con un niño, se le puede comparar con un ángel, con un agua “mi corazón es un poco de agua pura”, decía él en una carta), con una roca; en sus más tremendos momentos era impetuoso, clamoroso, mágico como una selva. Cada cual le ha visto de una manera. Los que le amamos y convivimos con él le vimos siempre el mismo, único y, sin embargo, cambiante, variable como la misma naturaleza. Por la mañana se reía tan alegre, tan clara, tan multiplicadamente como el agua del campo, de la que parecía siempre que venía de lavarse la cara.…